Todavía nos encontramos en el mes de octubre y tenemos pendiente la importante fecha de Halloween. Tras esta, llega la época del famoso «It’s time» de Mariah Carey, la Navidad y todas las tradiciones que conlleva. Meridiem trae en formato físico, junto a GameMill Interactive, el videojuego Rudolph: The Red-Nosed Reindeer, donde podremos vivir la alegría de esta festividad en un plataformas en tres dimensiones.
El juego ha sido desarrollado por Headless Chicken Games y nos propone acompañar a Rudolph a través de los acontecimientos de la película animada lanzada en la década de los sesenta. A lo largo de una sencilla estructura de niveles tridimensionales, plagados de plataformas, desafíos y coleccionables, conoceremos la historia del famoso reno. No solo controlaremos a Rudolph, ya que otros renos del trineo de Papá Noel también prestarán su ayuda para colaborar en modo cooperativo.
Una buena aventura navideña cooperativa
Su argumento, como mencionábamos anteriormente, se basa en el personaje de Rudolph: The Red-Nosed Reindeer y su película de animación. Rudolph tiene la importante misión, junto a sus compañeros, de recorrer numerosas ubicaciones como la Ciudad de la Navidad, la Isla de los Juguetes Defectuosos o el Castillo de Santa, entre muchas otras.
En cuanto a la mecánica del juego, acompañaremos al protagonista en fases de plataformas donde el objetivo es recoger la mayor cantidad de bayas posible. En algunas ocasiones, bastará con conseguir un número concreto o desplazarse de un punto a otro, tarea sencilla gracias a las habilidades del personaje. La historia se complica en determinados momentos, ya que habrá que llegar a lugares elevados para completar puzles o avanzar en la misión. Rudolph: The Red-Nosed Reindeer no destaca por su complejidad, sino por su accesibilidad. Rudolph dispone de bolas de nieve con las que puede activar bloques o cintas que lo transportan de un lugar a otro.
Pero recolectar campanas y bayas no será lo único que desafíe a Rudolph. También encontraremos chucherías navideñas que desbloquean fases secretas dentro del nivel. Además, existen pepitas de oro distribuidas por el escenario, que pueden intercambiarse por pistas para localizar objetos difíciles de encontrar al principio. Hay que evitar que Rudolph caiga en un charco o sea golpeado por bolas de nieve, ya que puede perder parte de su botín.
Escenarios genéricos con varios tipos de contenido
Rudolph: The Red-Nosed Reindeer es un juego bastante entretenido, especialmente para los más pequeños de la casa, aunque tiende a ser excesivamente genérico en cuanto a escenarios, enemigos y misiones. Los controles están bien elaborados, ofreciendo una clara diferenciación entre los renos disponibles, que presentan físicas y comportamientos distintos. La mayoría responde de manera diferente en superficies como el hielo o al realizar un gran salto. Todos los personajes pueden planear durante unos segundos tras efectuar un doble salto, así como ejecutar un salto largo para alcanzar plataformas lejanas.
A pesar de ser una experiencia divertida, tiene algunos fallos que impiden que resulte totalmente redonda. Uno de ellos es su cámara, que no responde correctamente y a veces queda atascada al chocar con una pared. Por otra parte, mecánicas como recibir impulso mediante corrientes de aire resultan imprecisas debido a las físicas del juego. Se echa en falta un pulido general que corrija estos pequeños detalles.
En conclusión
Rudolph: The Red-Nosed Reindeer es un videojuego ideal para los más pequeños o para quienes busquen un primer acercamiento a los títulos de plataformas. Este lanzamiento navideño aprovecha el carisma del personaje y la época festiva que se avecina. Algunos problemas de mecánicas y repetitividad pueden hacerlo algo monótono, además de resultar genérico en ciertos aspectos. No obstante, si pasamos por alto estos detalles y optamos por disfrutarlo en modo cooperativo, es un juego divertido y disfrutable en compañía.
*Agradecimientos a Meridiem por proporcionar una clave de Nintendo Switch para realizar este análisis.