Microsoft y Xbox, se ha fijado un compromiso de reducir significativamente el impacto medioambiental y convertirse en una empresa con emisiones de carbono negativas, agua positiva y cero residuos para 2030. En la Semana del Clima en Nueva York, Trista Patterson, directora de sostenibilidad de gaming en Xbox, subió al escenario para anunciar los progresos realizados.
En solo tres años, Xbox ha contribuido a este objetivo con intervenciones para reducir la energía procedente del uso de las consolas. Estas intervenciones, que incluyen la ecologización del código de los juegos y que los jugadores opten por modos de ahorro de energía, han evitado más de 1,2 millones de toneladas métricas de CO2e, en comparación con el uso sin intervenciones.
Según estimaciones de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), esta reducción evita que se liberen a la atmósfera emisiones equivalentes a más de 4800 millones de kilómetros recorridos por un coche (un turismo medio de gasolina).
Estas prevenciones se lograron gracias a:
- Hacer que el código de los juegos sea más eficiente desde el punto de vista energético con el Kit de herramientas de sostenibilidad de Xbox. Los desarrolladores de estudios como 343 Industries (Halo Infinite), Activision (Call of Duty: Modern Warfare II y Call of Duty: Warzone) y otros aprovecharon las herramientas de medición de energía y emisiones que ofrece el kit de herramientas de sostenibilidad de Xbox para identificar oportunidades de reducir el consumo de energía en sus juegos de forma imperceptible para los jugadores.
- Conseguir que las consolas Xbox sean más eficientes desde el punto de vista energético y de las emisiones. Los jugadores han ido adoptando la opción de Apagado (ahorro de energía), la configuración de energía de las horas activas y las descargas y actualizaciones de juegos Carbon Aware en sus consolas Xbox; esta última reduce la huella de carbono al optimizar las actualizaciones y descargas en los momentos en los que la consola puede utilizar más energía renovable.