Los videojuegos de esta generación están destacando por ser grandes producciones, con desarrollos que parecen más películas de cine, dado su realismo y alta calidad. En estos casos, también encontramos una falta de innovación y apuestas conservadoras que no permiten experimentar cosas nuevas. Steel Seed hace referencia a esto con un videojuego de acción que recuerda a las épocas de Tomb Raider y Uncharted, acompañado de grandes dosis de acción.
El título se ambienta en un mundo de ciencia ficción que está experimentando la desaparición de la humanidad, dado que este se encuentra dominado por las máquinas. Nuestra protagonista, Zoe, ha despertado en un mundo que no comprende y ha pasado de su forma humana a una totalmente robótica. Con sus nuevas capacidades y armamento, emprenderá un viaje en busca de respuestas junto a su compañero dron, Koby, y S4VI, quien la irá guiando hacia los mensajes que su padre, el Dr. Archer, ha dejado para ella.
Steel Seed narra la historia de Zoe con fases de acción y sigilo
Su narrativa y trasfondo, aunque algo tópicos, mantienen el interés mediante una serie de secuencias cinemáticas, además de los clásicos libros con anotaciones y datos que se encuentran en las instalaciones subterráneas que se visitan a lo largo de la partida. El desarrollo de Zoe se profundiza a través de diálogos y la interacción con diversos personajes. Estos monólogos son interesantes y una forma atractiva de contar la historia.
Las mecánicas jugables presentadas en Steel Seed beben de entregas como la franquicia Uncharted y, en gran medida, de lo visto en Star Wars Jedi: Fallen Order, otorgando una aventura muy lineal y cargada de acción. Quienes hayan podido disfrutar de estas entregas verán un título en el que se puede escalar y saltar entre plataformas que no llegan a ser desafiantes, todo ello mientras se fusionan fases de acción y sigilo. Las fases de plataformeo son entretenidas debido a su variedad y al buen hacer de la desarrolladora con los movimientos de Zoe, luciendo unos controles que responden de forma eficaz y un arsenal de movimientos que ofrece muchas posibilidades. Estas han sido bien planteadas, teniendo que utilizar en ocasiones a su dron Koby para continuar adelante.
El combate se centra totalmente en la acción, permitiendo atacar a diestro y siniestro sin tener que pensar demasiado y alejándose del estilo soulslike. Steel Seed ha desestimado la presencia de una barra de resistencia, lo que permite machacar botones constantemente y no tener freno en las habilidades. Esto, aparentemente, es una ventaja, pero le resta profundidad al sistema debido a la falta de estrategia a la hora de ejecutar movimientos. Los enemigos presentan buenos patrones de ataque, con armas de largo alcance y cuerpo a cuerpo, y pueden ser derrotados de diferentes formas. La IA de estos es avanzada, incluyendo movimientos como contraataques o bloqueos, que no pondrán las cosas fáciles.
El sigilo es otro de los conceptos introducidos en el juego. Aunque muy simple, cumple su función y ofrece una variedad de herramientas para ocultarse sin ser detectado. Algunas de estas herramientas incluyen coberturas con paredes para disparar y distraer a los enemigos, ataques silenciosos a enemigos desprevenidos o la utilización de elementos del entorno. El diseño de niveles ayuda mucho en este aspecto, proporcionando los suficientes objetos o rincones para dar rienda suelta a la imaginación y esconderse. Si bien esta mecánica no es obligatoria, sí es recomendable, ya que avanzar sin pensar y ejecutar movimientos sin sentido puede llevar a repetir la misión.
La progresión de los personajes y sus habilidades es buena, aunque en ciertos momentos estas mecánicas se estancan. En determinados puntos de la aventura, Zoe puede recolectar una moneda llamada glitch que permite adquirir movimientos a través de tres árboles de habilidades. Para desbloquear nuevas acciones, deben completarse desafíos sencillos como usar correctamente ciertos movimientos, escanear el entorno, localizar enemigos o esquivar ataques un determinado número de veces. Esto aporta variedad, obligando a explorar en profundidad las habilidades antes de desbloquear nuevas.
Técnicamente, Steel Seed utiliza el motor Unreal Engine 5 y su tecnología Lumen, contando con efectos de iluminación muy avanzados y modelados de personajes con animaciones y gestos realistas. Los diseños son ricos y variados, ofreciendo todo tipo de personalidades y gestos bien realizados. La ambientación tecnológica es acertada, así como un diseño de escenarios correcto, con los suficientes recovecos para esconderse y exprimir al máximo las habilidades de Zoe.
En conclusión
Steel Seed es un videojuego entretenido que, a pesar de su escasa innovación, cuenta con los suficientes elementos para mantener el interés. Sus fases de acción y sigilo son divertidas, sobre todo por el buen diseño de los escenarios. Su poca ambición e innovación lastran la experiencia, relegándolo a un juego de segunda fila.
*Agradecimientos a Cosmocover por proporcionar una clave de PC para realizar este análisis.