Tras varios años de espera, nos llega Rematch, un videojuego que combina juego online competitivo de fútbol, pero sin las reglas tradicionales del deporte. Como si de un Rocket League se tratase, aquí lo importante no es la táctica, sino dominar todas las habilidades y trabajar en equipo, en partidos con múltiples jugadores.
Uno de los aspectos clave de Rematch es la versatilidad de sus partidas, que pueden jugarse en formato tres contra tres, cuatro contra cuatro o cinco contra cinco. Los simuladores del deporte rey, como EA SPORTS FC o eFootball, apuestan más por asumir roles definidos como defensa, centrocampista o delantero. Aquí, salvo el portero, todos los jugadores cuentan con una serie de habilidades que deben dominar. La excepción la encontramos con el rol del guardameta: cualquier jugador que se encuentre tras la línea de los 16 metros se convierte automáticamente en portero.
El objetivo de la partida, que destaca por ser rápida y de corta duración, es marcar más goles que el oponente. Rematch es muy accesible para todo tipo de jugadores, ya que incorpora pocos botones y comandos muy sencillos con los que pasar, chutar o cabecear el balón. Esta simplicidad es engañosa, pues esconde una gran profundidad, ofreciendo una buena cantidad de tutoriales para aprender entre partida y partida: desde un comienzo básico con pases cortos hasta técnicas más avanzadas como un centro.
Una de las peculiaridades de Rematch, que puede desconcertar a jugadores de simuladores de fútbol convencionales, es que no se utilizan los botones chutar, sino el stick derecho. El disparo lo realiza el cuerpo del personaje, mientras que el stick contrario se usa para aplicar efecto al balón. Esta mecánica recuerda a los shooters, donde es crucial apuntar bien y posicionarse estratégicamente en el terreno de juego.
Cuando se recibe un balón en Rematch, lo primero y más importante es mirar hacia dónde se quiere dirigir el disparo. Al menos al inicio, ya que con el paso de las horas se aprende a posicionarse simplemente observando el radar en pantalla, y esto puede realizarse en un abrir y cerrar de ojos. Aunque al principio puede parecer algo complejo, en esencia se trata de encontrar el balón y llevarlo al fondo de la portería. El conocimiento táctico y técnico no tiene tanta cabida aquí; lo fundamental es trabajar en equipo y mover el esférico.
La anticipación frente a otros jugadores es clave para alzarse con la victoria: colaborar y dar ese pase decisivo que lleve el balón a su destino. Las físicas del esférico han sido muy bien trabajadas por la desarrolladora, lo que hace que dirigirlo sea una tarea sencilla. Esto, unido a sus controles intuitivos, facilita jugar y progresar desde las primeras partidas. La mecánica central se basa en el uso de los dos sticks: el izquierdo para dirigir los pases y el derecho para disparar a portería.
Uno de los aspectos más sorprendentes es la precisión con la que se puede controlar el balón y dirigirlo exactamente al lugar deseado. Esto convierte a Rematch en una propuesta muy divertida. Su modalidad online y las constantes actualizaciones lo hacen accesible y atractivo. No obstante, uno de los puntos negativos es la escasa cantidad de contenido en su lanzamiento. También se ve afectado por un sistema de progresión que favorece a quienes adquieren un pase de temporada por separado. Además, no hay demasiadas apariencias, estadios ni elementos interesantes por desbloquear.
Esto último es un arma de doble filo, ya que el juego no se centra en mecánicas de rol ni obliga al jugador a repartir atributos mediante experiencia, sino que apuesta por jugar partida tras partida. Se echa en falta la inclusión de más modalidades de juego. Por ahora, solo contamos con un prólogo en el que comenzamos como un futbolista novato cuyo sueño es llegar a la élite. Tras una breve secuencia, no se vuelve a saber nada de esa historia, una oportunidad desaprovechada por parte de Sloclap, ya que un modo individual habría sido un añadido muy interesante.
El juego se enfoca en el online y cuenta con un matchmaking correcto, emparejando de forma rápida con otros jugadores en su modalidad competitiva. Cabe mencionar que habrá muchos tipos de jugadores, algunos más individualistas, lo que puede derivar en derrotas. Rematch es un juego de equipo, y premia a quienes entienden y aplican esta filosofía.
En el apartado técnico, el videojuego apuesta por un estilo cel shading con modelos de personajes vistosos, uniformes con estilo y reminiscencias a los clubes profesionales del fútbol real. Los estadios están llenos de público que anima cada encuentro de forma efectiva. No hay música convencional durante los partidos, sino ritmos al estilo samba que evocan el fútbol callejero.
En conclusión
Rematch ofrece lo que muchos jugadores deseaban: fútbol arcade para todos los públicos. Podríamos definirlo como fútbol con alma de Rocket League, donde la colaboración y el trabajo en equipo son las claves para ganar. Su premisa es clara: partidas rápidas, sencillas de jugar, pero con una notable profundidad en sus controles. Algunos errores, como el pase de temporada o el escaso contenido inicial, empañan un poco la experiencia, pero no logran lastrar lo que es, en esencia, una propuesta fresca, divertida y muy prometedora.
*Agradecimientos a Cosmocover por proporcionar una clave de PC para realizar este análisis.
