El catálogo de Nintendo Switch 2 arranca de forma idéntica a como lo hizo su antecesora. Mario Kart es una franquicia que se ha abonado a los grandes lanzamientos de las consolas de Nintendo o, al menos, a fechas muy cercanas. Ya pudimos verlo con Game Boy Advance, Nintendo GameCube e incluso la propia Nintendo Switch original. Y es que Mario Kart es una franquicia que nos tiene malacostumbrados a partidas rápidas, con un gran sabor arcade y competiciones realmente divertidas. Es el momento de arrancar motores con Mario Kart World.
Tras once años con Mario Kart 8 y MarioKart 8 Deluxe, este último al que han sabido dar una gran calidad de vida durante todo su tiempo, llega una nueva entrega de la franquicia. Sin resultar tan completa como su antecesora, hace un gran esfuerzo por mejorar lo que ya parecía inmejorable. Esto, añadido a que viene incluido en uno de los packs de Nintendo Switch 2 con un código digital, es la combinación perfecta.
Mario Kart World es, a grandes rasgos, la culminación de muchos años de trabajo desde su llegada a Super Nintendo, reinventando la fórmula sin renegar de sus raíces. Estamos hablando de un videojuego de conducción completamente arcade, donde multitud de personajes de Nintendo se reúnen con sus mejores vehículos, luchando por ser el primero en cruzar la meta. Esta nueva entrega continúa ofreciendo la gran esencia de la serie, con las innovaciones necesarias para facilitar la adaptación de los nuevos jugadores.
Uno de los mejores aspectos de Mario Kart World es la cantidad de contenido que integra, con un buen volumen de personajes entre los que encontramos caras conocidas y otras totalmente nuevas. En total, hay 50 corredores, y 18 de ellos deben desbloquearse jugando, ya sea ganando el correspondiente Grand Prix o usando los potenciadores de Magikoopa. Según el personaje que utilices, tendrá un impacto directo en la carrera, con estadísticas distintas de velocidad, aceleración, peso o control. Estas estadísticas no se pueden ver a simple vista, sino que se perciben al correr: Mario es el más equilibrado, mientras que Bowser es el más rápido, pero con una aceleración más baja y un control más brusco.
No solo se desbloquean personajes, sino también más de un centenar de apariencias alternativas que se irán descubriendo conforme se exploren los circuitos y las zonas libres. Mario, Donkey Kong, Pauline e incluso una simpática vaca tendrán trajes entre los que seleccionar. Otra de las novedades es la presencia de un nuevo objeto: una bolsa de comida rápida que impulsa como un champiñón y, de forma inmediata, desbloquea una apariencia alternativa. Estas se encuentran repartidas por todo el mundo y nos animan a explorarlo por completo.
El concepto de un mapeado de mundo abierto tiene ciertos matices. Otorga una buena libertad, se puede acceder a él desde el menú principal y permite explorar cada uno de los rincones que no se ven en detalle durante las carreras. Lugares lejanos, zonas cercanas al agua y colinas son solo algunas de las situaciones que se muestran en Mario Kart World. Las secciones están tematizadas con escenarios muy variados, y pueden explorarse en cooperativo con varios jugadores a través de la opción GameChat. Es una forma de extender las posibilidades del juego y explorarlo, aunque a largo plazo se convierte en una modalidad pensada principalmente para completistas.
La selección de circuitos incluye 32 trazados que combinan novedades, remasterizaciones e incluso renovaciones de otros títulos. Tenemos presencia desde Super Nintendo hasta Wii U y Nintendo Switch, con un número que muy probablemente se ampliará en el futuro. También hay ocho copas disponibles en 50cc, 100cc y 150cc, viendo la desaparición de la modalidad 200cc. Apostamos a que esta también estará disponible más adelante mediante una actualización. Con temáticas variadas, diseños acertados y desafiantes, son algunas de las bondades de esta entrega. A ello se suman multitud de trampas y atajos que se pueden descubrir para sacar ventaja a tus rivales.
Uno de los elementos que se han visto sometidos a cambios es el desplazamiento de los karts en zonas de agua, pasando de navegar por el fondo a hacerlo sobre la superficie. El planeo ha sido sustituido por el vuelo, incorporando unas alas que se despliegan desde el vehículo. Los circuitos han sido expandidos para que saltar, ganar velocidad por barandillas, rebotar sobre paradas o incluso pisar a rivales sea una práctica más novedosa y asequible. Otras cifras a tener en cuenta son los más de 90 enemigos que puedes cruzarte por la pista y 40 elementos que, al impactar, reducen la velocidad de tu kart. Más de 20 vehículos y objetos son la guinda del pastel entre las novedades. Se ha perdido la opción de ensamblar los karts por piezas como se hacía anteriormente, en favor de una mayor facilidad, además de poder personalizarlos con pegatinas.
La conducción continúa siendo clave, y más tratándose de un juego arcade. Es un título que, sobre el papel, sigue la estela de la franquicia, pero que ha sido refinado para ajustar todos sus aspectos, como disponer de objetos más justos según tu posición en la clasificación. Además, otros puntos como la inercia, la sensación de velocidad, los saltos, las animaciones de derrape o el equilibrio han sido mejorados para ofrecer una experiencia más realista. En cuanto a los objetos, mencionar que hay un total de 28, tres de ellos nuevos, incluyendo un caparazón dorado que, al lanzarlo repetidamente, otorga monedas; la comida rápida; y la presencia de Magikoopa, que al ser lanzado invoca enemigos contra los jugadores que se encuentren por delante. A pesar de que se ha buscado hacer un juego más justo en cuanto a los objetos recibidos según la posición, sí que notamos que la primera posición se ve demasiado penalizada, recibiendo constantemente monedas, plumas o plátanos.
Mario Kart World dispone de un buen puñado de modalidades, como Grand Prix, donde jugar ocho copas diferentes, Contrarreloj y Versus, en el que disputar carreras con cuatro jugadores por consola en modo local u ocho sincronizando dos consolas Nintendo Switch 2. También se incorpora un modo batalla donde el objetivo es destruir los globos del oponente. El modo que más destaca es una carrera de supervivencia, donde el último de los corredores es eliminado en cada punto de control, hasta que solo quede uno. Jugar en multijugador siempre es divertido, pero las opciones individuales y su ampliación han sido acertadas, incluyendo su experiencia en línea, donde las modalidades alcanzan otro nivel.
Otros puntos a matizar, y que pueden pasar desapercibidos, se encuentran en lo técnico, con transiciones entre noche y día e incluso estaciones al cambiar de circuito. En lo visual, Nintendo ha hecho un gran trabajo, dotando a cada lugar de una mejor iluminación con elementos dinámicos, texturas más nítidas, más animaciones y una sensación de velocidad muy lograda. Todo esto, sumado a su gran banda sonora, redondea un título de lanzamiento muy a tener en cuenta.
En conclusión
Mario Kart World es una ampliación de lo que hemos ido viendo generación tras generación. Con este juego se ha conseguido dar un paso más adelante y pulir mucho su jugabilidad, haciéndola más adictiva, sencilla y accesible. Nos ha encantado la gran cantidad de contenidos que introduce, tanto para un jugador como para varios, además de una selección de circuitos acertada y que, con toda probabilidad, será ampliada junto con la posibilidad de competir en 200cc. Si vas a hacerte con una Nintendo Switch 2, te aconsejamos que lo hagas con el pack que incluye el título, siendo uno de los grandes juegos de su lanzamiento.
*Agradecimientos a Nintendo por proporcionar una clave de Nintendo Switch 2 para realizar este análisis.
