La serie de animación Hot Wheels Let’s Race, estrenada el pasado año en Netflix, ya cuenta con su videojuego bajo el subtítulo Ultimate Speed. En este encontraremos a todos sus personajes como Mac, Bright, Coop o Spark, entre otros, conduciendo los míticos vehículos de Hot Wheels. Con coches y caracteres con sus propias habilidades, nos adentramos en carreras vertiginosas, acrobacias y, sobre todo, adrenalina. Llega con una gran edición física de mano de Meridiem a PlayStation 5 y Nintendo Switch.
Como mencionábamos en el párrafo anterior, cada vehículo tiene sus ventajas únicas, así como sus desventajas. Hot Wheels Let’s Race: Ultimate Speed desafía con algunos de sus coches con baja maniobrabilidad pero que, al mismo tiempo, son mucho más rápidos en aceleración, mientras que otros son mucho más amigables en la conducción pero cuentan con menor velocidad. Todo esto se equilibra con el personaje elegido, combinándolos para diseñar una experiencia acorde al jugador.
Conducción accesible para todos
Por ejemplo, Mac o Coop tienen menos habilidades de maniobra, haciendo que se tomen las curvas con menor acierto, pero que posteriormente se puede corregir con un vehículo que contrarreste este factor. Esto añade una buena capa de profundidad, haciendo que la apuesta pueda ser más arriesgada con un vehículo y piloto que maniobren peor pero que cuenten con una gran velocidad, o apostar por algo más seguro y ser menos rápidos, pero con movimientos más apurados. Estas estadísticas son un detalle interesante y, una vez aprendidas, pueden decantar la balanza de una partida.
El título incluye varias zonas temáticas con una variedad de circuitos. Esto se hace a través del Campamento de Carreras, donde convertirse en el campeón a través de doce circuitos disponibles. La principal premisa será quedar en primera posición para obtener insignias; aquel que consiga más será el campeón. También incluye las opciones de copa con varios circuitos, carrera libre y contrarreloj, todos estos pudiendo disfrutarse con hasta cuatro jugadores en modo multijugador local.
Corre y diseña tus propios circuitos
La modalidad copa cuenta con interesantes parámetros de personalización, pudiendo elegir la velocidad de la carrera entre lenta, media, rápida o ultra. Esto es una buena idea debido a que Hot Wheels Let’s Race: Ultimate Speed está destinado a un público más juvenil y su dificultad no resulta muy desafiante para los más veteranos en el género. Para que os hagáis una idea, la velocidad es similar a la de Mario Kart al subir las cilindradas, pero de una forma algo más básica. Se tienen tres copas disponibles: Carrera urbana, Locura lunar y Circuito de campeones. Si se cumplen ciertos requisitos, se accederá a sus versiones doradas. Cada una de estas, a su vez, cuenta con una batalla final contra un jefe extraído de la serie de animación.
Los vehículos copan parte del protagonismo en Hot Wheels Let’s Race: Ultimate Speed, teniendo míticos como el GT-Scorcher o el Duck’n Roll, entre muchos otros. Como mencionábamos anteriormente, cada uno incorpora sus habilidades, manejo y estilo, que los diferencian bien los unos de los otros. También cuentan con algunas opciones de personalización básicas, como una pegatina identificativa que le proporciona una habilidad concreta, como aceleración o derrape. A la hora de correr, el juego es algo exigente, ya que no permite salir de las pistas: si lo haces, serás traído de vuelta y penalizado durante unos segundos. Eso sí, algunas de las zonas más conflictivas cuentan con quitamiedos para que la competición sea algo más justa.
Uno de los puntos más fuertes de Hot Wheels Let’s Race: Ultimate Speed es lo fidedigno que es en cuanto a la serie original, siendo muy colorido. Las animaciones de los personajes son acertadas, al igual que la buena sensación de velocidad, digna de la franquicia Hot Wheels. Si te has cansado de conducir, también se ha incluido un diseñador de pistas sencillo y accesible, pudiendo rotar cada una de las piezas para realizar tus propias creaciones.
En conclusión
Hot Wheels Let’s Race: Ultimate Speed es un notable juego para todo tipo de edades, sintiéndose que se ha destinado a un público juvenil. La sensación de velocidad ha sido conseguida, al igual que la ambientación de la serie de televisión, contando con vehículos de todo tipo y multitud de modificadores que hacen que la experiencia sea totalmente diferente.
*Agradecimientos a Meridiem por proporcionar una clave de PC para realizar este análisis.
