La franquicia Final Fantasy no siempre ha sido sinónimo de entregas numeradas. Como todas las sagas, ha gozado de experimentos e incluso spin-offs de gran calidad. Una de estas iteraciones es Final Fantasy Tactics, que llegó a definir un género táctico propio, con multitud de acciones, una gran historia y detalles que se van desgranando y paladeando a lo largo de las horas. Con esa idea llega Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles.
Ciertamente, es un título muy solicitado por la comunidad a Square Enix, tanto en forma de remake como de remaster. La compañía nipona ha atendido esas peticiones trayendo un videojuego que originalmente se lanzó en 1998 en Occidente para PlayStation. En su día llegó de forma discreta, ya que el esperado Final Fantasy VII acaparaba la atención, pero aun así obtuvo ventas aceptables en nuestro país.
Una historia con el sello de Yasumi Matsuno
Una de las peculiaridades del original es que estuvo dirigido por Yasumi Matsuno, responsable de RPGs de gran importancia como Vagrant Story, Tactics Ogre o Final Fantasy XII. Más tarde trabajó en PlatinumGames en producciones como MadWorld, y en esta versión de Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles se encargó también del guion.
La historia nos pone en la piel de Ramza Beoulve, quien vive las consecuencias de la Guerra de los Cincuenta Años entre Ivalice y Ordalia: pobreza, hambre y un reino sin rey. Dos facciones luchan por el control y, desde una familia noble, Ramza se ve involucrado en el conflicto. Le acompaña su amiga de la infancia, Delita; la muerte de la hermana de ésta obliga a Ramza a unirse a un grupo de mercenarios para proteger a Ovelia, una de las herederas al trono, mientras que Delita termina alineado en el bando opuesto.
El guion se inspira en conflictos reales como la Guerra de las Rosas en Inglaterra y la Guerra de los Cien Años, trasladándolos a una ambientación medieval que aporta un sello propio al universo Final Fantasy de la época. La construcción del personaje de Ramza destaca por su desarrollo: vemos cómo un noble se convierte en guerrero dispuesto a arriesgarlo todo por una causa justa. Delita, por su parte, no solo combate al enemigo exterior, sino que también lucha contra sus traumas personales. No podemos olvidar el mundo de Ivalice: una estética medieval que ensalza la atmósfera de Final Fantasy y la tradición de siglos pasados.
Una notable implementación del RPG táctico
Uno de los puntos más destacados de Final Fantasy Tactics es su jugabilidad. Se trata de un RPG táctico sobre un mapa cuadriculado, similar a un tablero de ajedrez, en el que cada personaje tiene movimientos y acciones determinados. Tanto enemigos como aliados comparten el escenario, por lo que hay que pensar bien cada turno y optimizar las acciones. En esta edición se han corregido algunos bugs conocidos que facilitaban demasiado los combates, dejando ahora un equilibrio más sólido entre las tropas y mejoras estadísticas que homogeneizan la dificultad.
La comunidad también pidió cambios muy concretos, y varios fueron atendidos: eliminación de las batallas aleatorias obligatorias, posibilidad de acelerar el ritmo de los combates, funciones de autoguardado, visualización del flujo de turnos, personalización del equipo y un árbol de habilidades y sistema de misiones completamente rediseñado y más accesible. A nivel jugable, Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles ofrece dos modos: el clásico —con controles y gráficos originales, pero con mejoras en el guion— y una opción remasterizada con las mejoras mencionadas y otras añadidas.
Sin embargo, un pero importante es que esta remasterización se basa en la versión de PlayStation y no incluye el contenido extra de la versión de PSP, The War of the Lions. Aquella edición expandía aún más la entrega; esta versión se ha centrado en ofrecer la experiencia del original con mejoras gráficas, de calidad de vida y resolución. Otro aspecto negativo es la localización: los textos en pantalla llegan en inglés, lo que puede ser un obstáculo para quienes prefieran jugar en castellano y duden debido a la complejidad del argumento.
Mejoras en lo jugable y táctico
Entre las otras mejoras, el creador original ha añadido nuevos diálogos y escenas que no estaban en la edición de 1998. También se introducen líneas de diálogo durante las batallas, lo que aumenta la intensidad y permite conocer mejor a algunos personajes. El juego incluye doblaje tanto en inglés como en japonés, y se ha ampliado con numerosas misiones secundarias, una nueva zona por explorar y la posibilidad de revisar datos de la historia que pudieron pasar desapercibidos.
En el plano técnico, hay un profundo lavado de cara respecto al original. Los diseños de personajes se mantienen, pero ahora todo se ve más nítido, limpio y definido: se ha eliminado el ligero blur del original, se han intensificado los colores de personajes y escenarios, los menús se han ajustado para ofrecer una interfaz más clara y amigable, y se han mejorado animaciones y efectos de iluminación.
En conclusión
Final Fantasy Tactics: The Ivalice Chronicles es algo más que una simple remasterización gráfica. Como acostumbra Square Enix, junto a las mejoras técnicas se suman contenidos jugables, una reestructuración y modernización de la experiencia original y un doblaje de calidad. Si hay que ponerle un pero, además de la ausencia de la versión de PSP, echamos en falta la localización al castellano, un detalle que podría disuadir a algún jugador. Sea como fuere, es el regreso de uno de los iconos de la saga, ya disponible en plataformas digitales.
*Agradecimientos a Square Enix por proporcionar una clave de PlayStation 5 para realizar este análisis.