La llegada de contenidos descargables tras el reciente lanzamiento de un videojuego es algo a lo que las desarrolladoras nos tienen acostumbrados. Es una práctica que Nintendo no ha explotado en exceso, pero ha sorprendido a propios y extraños con la llegada de Donkey Kong Bananza: Isla de DK + Caza de Esmeraldas, una expansión del contenido base con una nueva isla, misiones y más contenido para quienes hayan concluido el título.
Este DLC llegó por sorpresa tras el último Nintendo Direct y añade una nueva ubicación y un notable modo arcade. Eso sí, tiene un ligero “pero”: para disfrutarlo es necesario haber completado la historia principal, de modo que Nintendo obliga, entre comillas, a jugar la campaña base. Sin embargo, esto no supone un impedimento, ya que la historia es muy entretenida, con buena duración y llena de sorpresas. Si ya la has terminado, te invitamos a seguir leyendo.
Isla de DK: un lugar donde dar rienda suelta a la destrucción
La primera parte de Donkey Kong Bananza: Isla de DK + Caza de Esmeraldas consiste en una localización que traerá grandes recuerdos a los jugadores: la Isla DK, conocida por haber albergado entregas como Donkey Kong 64. Ahora puede ser revisitada y en ella se puede coincidir con personajes como Diddy, Dixie y Cranky Kong. También regresa el rinoceronte Rambi, siempre dispuesto a ayudar, y los loros Squawks, que cobran importancia al permitir intercambiar fichas de plátano por estatuas que se van ubicando por la isla.
Este escenario da mucho de sí no solo por sus grandes dimensiones, sino también por todas las recompensas ocultas que animan a explorarlo al máximo. Un ejemplo curioso son los bongos de Donkey Konga, aquel videojuego nacido en Nintendo GameCube. Como en Donkey Kong Bananza, es posible excavar en prácticamente cualquier zona y descubrir lugares como la casa del protagonista, niveles ocultos con fases especiales y todo tipo de recompensas. Esta isla no es un simple añadido, sino un espacio pensado para investigar y rejugar con entusiasmo.
Un nuevo modo de juego que fomenta la rejugabilidad
Además de la isla, este DLC incluye un nuevo modo que destaca por su frenetismo y velocidad. En él se debe recoger el mayor número posible de esmeraldas en un tiempo establecido. Tras derrotar a Void Kong en la historia principal, ahora DK es contratado como su nuevo empleado, recolectando esmeraldas. Esta modalidad puede jugarse con límite de tiempo o en oleadas, desafiando al jugador a destruir y localizar la mayor cantidad posible para ascender en la jerarquía de empleados. Todo esto se traduce en recompensas como disfraces adicionales y nuevos niveles.
Este modo también da acceso a ventajas que mejoran las habilidades de Donkey Kong. Al iniciar una partida sin ellas se empieza con lo más básico, pero al ascender se puede comenzar con hasta tres ventajas que potencian al personaje. Entre ellas están transformaciones desde el primer minuto o el uso de barriles para desplazarse más rápido. La búsqueda se desarrolla en las cinco capas de la trama principal: laguna, colina, cañón, congelador y festín, lo que hace que revisitar zonas resulte divertido y con un extra de desafío. En conjunto, este contenido suma varias horas de juego adicional.
En conclusión
Donkey Kong Bananza: Isla de DK + Caza de Esmeraldas es un contenido digital muy acertado que amplía la experiencia tras finalizar la campaña principal. Su precio es de 19,99 € y aporta una nueva ubicación, un modo de juego distinto y más razones para volver a disfrutar de esta aventura.
*Agradecimientos a Nintendo por proporcionar una clave de Nintendo Switch 2 para realizar este análisis.