El género roguelike es algo que vemos día a día en los videojuegos, aunque no es habitual encontrarlo en títulos de conducción y mucho menos en propuestas arcade. Desert Race Adventures fusiona este concepto con la estrategia, donde cada decisión importa y afecta directamente a la conducción. Gestiona los recursos para salir indemne de un rally desértico y mantén con vida a tu piloto y copiloto, así como al propio vehículo.
Como mencionábamos, Desert Race Adventures ofrece partidas únicas, aunque sus mecánicas terminan generando ciertas limitaciones. Cada partida se genera aleatoriamente y, al inicio, se debe elegir entre tres pilotos y tres copilotos, cada uno con habilidades que aportan ventajas como un menor consumo de combustible o comida, o una mayor tolerancia a la fatiga. Estas características, junto a otras estadísticas, deben gestionarse utilizando tres ranuras disponibles en el vehículo.
En Desert Race Adventures cada decisión cuenta
Por ejemplo, podemos encontrar repuestos para reparar el coche, comida para reponer fuerzas, un botiquín de primeros auxilios o un kit de remolque. Lo interesante es el peso de cada objeto, un factor determinante que impacta en la velocidad, aceleración o distancia diaria que puede recorrerse. A partir de ahí, es el jugador quien decide la velocidad o cuántas veces parar a repostar. Cuanto más rápido se circule, mayor será el consumo tanto de comida como de combustible, que solo se recargan parcialmente en los puntos de control. Quedarse sin recursos termina la partida, por lo que la velocidad también determina los daños que puede sufrir el vehículo.
Durante las fases nocturnas el jugador tiene menor control, ya que se presentan eventos aleatorios donde deberá aceptar el destino y ajustar velocidad y recursos. Lo que parece un atajo puede convertirse en una trampa, provocando pérdidas de orientación y un mayor gasto de suministros. La fatiga de piloto y copiloto es clave: cuanto mayor sea, más probabilidad habrá de sufrir un accidente, lo que provoca daños en el vehículo y afecta al estado de salud de ambos. Todo culmina en puntos de control donde descansar, reparar o comprar suministros. Descansar consume un día, pero en muchos casos puede ser fundamental para sobrevivir.

Asumir riesgos y gestionar correctamente los recursos son las bases de Desert Race Adventures. Al finalizar una partida se recibe una puntuación que se publica en una clasificación online. Uno de los problemas es que no ofrece Nueva Partida+ ni la posibilidad de comenzar con ventajas obtenidas previamente. Cada partida es independiente, aunque pueden aparecer variaciones como lluvia o tormentas de arena. Otro inconveniente es que la mayoría de los eventos aleatorios tienen efectos negativos, siendo muy pocos los que aportan beneficios. Esto, unido a la constante necesidad de recargar combustible o comida, puede hacer que las partidas resulten repetitivas.
El pixel art es uno de los puntos fuertes de Desert Race Adventures, con vehículos coloridos y sencillos, y entornos que, aunque tienden a repetirse, resultan agradables. Los efectos técnicos, pese a su sencillez, cumplen correctamente, y la banda sonora chiptune ofrece una grata experiencia audiovisual.
En conclusión
Desert Race Adventures es un título que apuesta por innovar, dándole un giro al género de conducción mediante elementos roguelike. Deja sensaciones encontradas, ya que muchas de sus acciones dependen del azar y no tanto de la toma de decisiones del jugador, generando efectos negativos de forma constante. Aunque resulta entretenido, presenta limitaciones que podrían hacer que algunos jugadores opten por otros roguelikes.
*Agradecimientos a Black Smoke Studios por proporcionar una clave de Nintendo Switch para realizar este análisis.