Hoy os hablamos de Little Problems: A Cozy Detective Game, un título que nos sumerge en una historia detectivesca pero que, al mismo tiempo, reflexiona sobre los problemas del día a día y cómo los afrontamos. Todas las personas atraviesan diariamente sus propios desafíos, trabajar, pagar facturas o ir a clase, y para Mary, nuestra protagonista, estos incluyen acudir a la universidad, cuidar de sus hermanos y atender a su mascota. Basado en Golden Idol, el juego plantea sus desafíos con un tono divertido y cercano.
La gestión de la dificultad en Little Problems es progresiva: recorremos la vida de Mary a través de diversos momentos cotidianos en los que hay que ayudarla con tareas de organización y gestión. La desarrolladora se inspira en las mecánicas de Golden Idol, pero en lugar de investigar crímenes se centra en situaciones mundanas, con una atmósfera “cozy” ideal para partidas breves.
Puzles mundanos y divertidos
Podemos, por ejemplo, averiguar qué le ha ocurrido a la mascota de Mary en una clínica veterinaria o investigar por qué se han reservado dos salas en la universidad para organizar un grupo de estudio. Estas situaciones se desarrollan mediante un sistema de pistas sencillo: hay que recopilar hasta el más mínimo detalle y empezar a atar cabos. La dificultad comienza con puzles accesibles y evoluciona hacia retos más exigentes, sin llegar a frustrar al jugador.
El equilibrio en el diseño de pistas es notable: el mundo presenta multitud de elementos interactivos que permiten profundizar en cada caso. Desde el primer momento es posible consultar la fecha y la hora de los sucesos, leer carteles, notas o comentarios de los personajes; incluso interpretar el lenguaje no verbal de un animal o fijarse en un detalle aparentemente insignificante puede ser clave para resolver el caso.
Reúne pistas y haz uso de la lógica
El uso de la lógica y la deducción está en el centro del juego, pero mostrado a través de situaciones cotidianas. Por ejemplo, Mary y sus amigos deben reunirse para ir a un concierto y no lo consiguen; la solución puede requerir revisar publicaciones en redes sociales, localizar entradas con información y conectar los datos. La resolución de cada caso depende de la profundidad del trabajo del jugador: cuanto más se investigue, antes aparecerán las respuestas clave.
Es un título que pide tiempo, pero ofrece las comodidades necesarias para partidas cortas: permite avanzar a ritmos diferentes según las ganas del jugador. A veces no basta con aplicar la lógica más evidente; hay que suponer, leer entre líneas o dar un paso más allá de lo que sugiere una pista.
En el aspecto visual, Little Problems destaca por sus entornos y personajes coloridos, con situaciones que rozan lo humorístico y le confieren encanto. La estética amigable potencia la sensación de calidez y acompaña muy bien el tono del juego.
En conclusión
Little Problems: A Cozy Detective Game es una propuesta satisfactoria para quienes buscan una experiencia de puzles con una estética agradable y una dificultad que se ajusta conforme avanza la partida. Ideal tanto para sesiones cortas como largas, su principal atractivo es indagar en situaciones mundanas repletas de pistas y descubrimientos.
*Agradecimientos a Amplified Games por proporcionar una clave de PC para realizar este análisis.
