Deadzone: Rogue – Un frenético roguelite ubicado en una nave espacial

Análisis PC Análisis PlayStation 5 Análisis Xbox Series
Deadzone: Rogue – Un frenético roguelite ubicado en una nave espacial
Deadzone Rogue

Prophecy Games, quienes ya estuvieron a los mandos del desarrollo de TRIBES 3: Rivals, un shooter en primera persona por equipos, se atreven ahora con una nueva producción que aporta mayor profundidad a su jugabilidad. Deadzone: Rogue apuesta por la misma tónica que su anterior propuesta, pero añadiendo toques roguelite con una premisa entretenida y desafiante.

Una nave espacial infestada de malvados robots y criaturas

La trama nos traslada al papel de nuestro protagonista, quien despierta dentro de la nave espacial ISS-X con una pistola en la mano y habiendo perdido todos sus recuerdos. Está totalmente solo en un entorno retorcido, plagado de robots y criaturas que únicamente quieren acabar con su vida. Cuando muere, despierta nuevamente en el mismo punto, convirtiendo todo en un bucle constante. No tiene otra opción que recorrer los pasillos de la nave, descubrir qué ocurrió, acabar con la amenaza y, lo más importante: descubrir quién es realmente.

Su historia recuerda, salvando las distancias, a Deathloop. El guion no es demasiado enrevesado ni sorprendente, pero cumple su función. Está acompañado por registros de texto situados en mesas, suelos o casi cualquier rincón, además de los diálogos internos del protagonista. Estos diálogos destacan por su ironía y aportan tanto pistas de hacia dónde dirigirse como pequeños toques de personalidad.

En cuanto a términos jugables, Deadzone: Rogue basa sus partidas en salas infestadas de enemigos, a las que conviene acceder con el máximo sigilo posible para estudiar la posición de los rivales y planear los movimientos antes de luchar. Al inicio se comienza únicamente con una pistola, granadas y la habilidad de correr, pero pronto se desbloquea un amplio arsenal que incluye cuchillos, hachas, escopetas, fusiles, rifles y mucho más.

Deadzone: Rogue ofrece una experiencia frenética y cooperativa

Todas las armas tienen un diseño moderno y algunas producen efectos poco habituales que, aunque al principio pueden resultar extraños, aportan un soplo de aire fresco a la jugabilidad. El armamento está dividido en categorías de rareza, que van desde común hasta legendario. Cuanto más rara es un arma, mayor será su daño o los efectos que produce sobre los enemigos. Además, estas armas pueden mejorarse con chatarra obtenida en las salas, mediante un sistema sencillo y esquematizado que permite potenciar su rendimiento con solo pulsar un botón.

Cuando derrotamos a un enemigo, este puede soltar armas, munición u objetos que resultan muy útiles para avanzar. Los aumentos otorgan habilidades espectaculares y ventajas en el daño, mientras que los objetos proporcionan habilidades pasivas permanentes. Todo ello permite configurar el estilo de cada partida, lo que hace que cada jugador disfrute de una experiencia única adaptada a su forma de jugar.

Deadzone: Rogue

Deadzone: Rogue se rige por la clásica premisa de los roguelite: cumplir tu objetivo o morir y volver al inicio. Como es lógico, al morir se regresa al punto de partida sin objetos ni armas, por lo que es recomendable tener cierta tolerancia a la frustración antes de enfrentarse a él. Para completar el juego es necesario superar tres zonas principales, lo que puede hacer que la experiencia parezca corta. Sin embargo, cuenta con numerosos objetivos y desafíos opcionales que desbloquean nuevas armas, ventajas y objetos, extendiendo la duración de manera natural. Además, es posible aumentar su dificultad para ofrecer un reto mayor.

Otro punto a destacar es su modo cooperativo para hasta tres jugadores, que multiplica el factor diversión y convierte cada partida en una experiencia mucho más dinámica.

Bueno técnicamente y un gran rendimiento

En el plano visual, Deadzone: Rogue presenta una estética futurista marcada por una gama cromática dominada por el violeta. Aunque este estilo es llamativo, en ocasiones puede llegar a ser algo monótono. Las salas intentan ofrecer un diseño aleatorio, pero en la práctica se limitan a proponer entornos similares con ligeras variaciones. Aun así, cada zona tiene su propia historia y aporta un toque diferenciador al inicio de cada partida.

Deadzone Rogue

En cuanto al rendimiento, el juego destaca positivamente: fluye con rapidez incluso cuando las salas están repletas de enemigos y sus tiempos de carga son muy cortos, algo que se agradece en un título de estas características.

En conclusión

Deadzone: Rogue es un FPS con tintes roguelite que ofrece una experiencia entretenida y desafiante, especialmente recomendable en cooperativo. Su amplio arsenal, sistema de mejoras y efectos variados enriquecen cada partida, aunque la repetición de escenarios puede volverse algo monótona tras muchas horas de juego. En conjunto, es una propuesta sólida que combina acción intensa, progresión dinámica y diversión en equipo, ideal para quienes disfrutan de experiencias rápidas, frenéticas y rejugables.

*Agradecimientos a ICO Partners por proporcionar una clave de PC para realizar este análisis.

Lo mejor:

  • Jugabilidad desafiante y variada
  • Amplio arsenal personalizable
  • Cooperativo y rejugable

Lo peor:

  • Dificultad algo frustrante
  • Repetición de escenarios
  • Estética algo monótona
7.8

Bueno

Argumento: - 7
Jugabilidad: - 8
Gráficos: - 8.5
Sonido: - 7.5
34 primaveras. Apasionado del mundo de los videojuegos y la comunicación. Fan de Zelda y Final Fantasy a partes iguales.
TwoHitGames - Videojuegos, indie y tecnología
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Verificado por MonsterInsights